¿Quieres mejorar tu autoestima?, entonces planifica y ordena.
Importancia del adecuado desarrollo de las funciones ejecutivas para tener una buena autoestima.
Entendemos por funciones ejecutivas el conjunto de habilidades cognitivas superiores que nos permiten #planificar, #organizar, tomar #decisiones, resolver #problemas, controlar nuestras #acciones, #flexibilizar nuestro pensamiento, así como regular nuestras #emociones.
Son responsables de la #coordinación y #ejecución de actividades complejas y están ubicadas en la corteza prefrontal del cerebro. Se desarrollan durante la infancia y la adolescencia, pero continúan en evolución a lo largo de la vida. Son fundamentales para el desarrollo y mantenimiento de habilidades importantes, como la autorregulación, el autocontrol, la concentración, el razonamiento lógico, la toma de decisiones y la resolución de problemas.
Las funciones ejecutivas nos permiten llevar a cabo actividades diarias de manera eficiente y adaptativa. Sin embargo, cuando están alteradas, pueden presentarse dificultades en el desempeño académico, laboral, social y emocional. Son esenciales para un funcionamiento cognitivo óptimo y un desarrollo personal saludable.
Por otro lado, que entendemos por autoestima es la valoración, percepción y aprecio que una persona tiene de sí misma. Es la forma en la que nos vemos y nos sentimos acerca de nuestras habilidades, logros, apariencia física, valor personal y aceptación emocional. Una persona con una alta autoestima se siente #segura, #confiada, #capaz y #valiosa, mientras que alguien con baja autoestima puede sentirse inseguro, no valorado y con falta de confianza en sí mismo. La autoestima es fundamental en el desarrollo personal y puede influir en nuestras relaciones, metas, decisiones y bienestar emocional.
Pero, ¿están relacionadas las funciones ejecutivas con la autoestima?
El buen desarrollo de las funciones ejecutivas es fundamental para una buena #autoestima debido a varios factores:
Toma de decisiones: Las funciones ejecutivas ayudan a evaluar las opciones disponibles y elegir la mejor alternativa. Una persona con buenas habilidades ejecutivas tendrá más confianza en su capacidad para decidir adecuadamente, lo que fortalecerá su autoestima.
Planificación y organización: Las funciones ejecutivas permiten establecer metas, crear un plan de acción y organizar los recursos necesarios para lograr esos objetivos. Una persona que puede manejar eficientemente estas tareas se sentirá más capaz y competente, y con ello mayor percepción de autoeficacia.
Control de impulsos: Las funciones ejecutivas también ayudan a regular las emociones y controlar los impulsos. Una persona que puede mantener la calma y reflexionar antes de actuar impulsivamente tendrá una mayor sensación de control sobre su vida y seguridad, lo que favorecerá su autoestima.
Flexibilidad cognitiva: Las funciones ejecutivas permiten adaptarse a los cambios y encontrar soluciones alternativas cuando se presentan obstáculos. Una persona con habilidades ejecutivas bien desarrolladas se sentirá más capaz de enfrentar los desafíos y superar los problemas. Un aspecto clave para nuestra autoestima.
En resumen, el buen desarrollo de las funciones ejecutivas proporciona a una persona las habilidades necesarias para tomar decisiones, planificar, organizar, controlar impulsos y adaptarse a los cambios. Estas habilidades son vitales para tener una buena autoestima, ya que permiten a una persona confiar en su capacidad de enfrentar los desafíos de la vida de manera efectiva y lograr sus metas.
Ana Ruiz Montoya
Psicóloga Col. Nº M-16245
Centro Psicológico Loreto Charques